En toda evolución llega un momento que nos tenemos que liberar de las cargas que llevamos para poder pasar al siguiente nivel. El conocimiento de uno mismo es la herramienta que nos permite liberar y disolver aquello que no nos debe acompañar para poder alcanzar un nuevo estado de consciencia evolutiva.
Experimentar la vida, es algo que todos hacemos, la sufrimos y disfrutamos, pero lo que realmente hace que estas experiencias se transformen en conocimiento, es que seamos conscientes, que estemos en el momento que éstas suceden para extraer el conocimiento que hay detrás de todas ellas. La receptividad del momento juega un papel fundamental, en nuestro camino evolutivo, hacer es importante, pero hacer conscientemente es la llave que nos abre la puerta del conocimiento de nosotros mismos. No podemos conocer si parte de nosotros no está en el momento que acontecen los sucesos y por lo tanto será imposible que nos podamos sincronizar con la causalidad de las experiencias.
Tomar la decisión de sanar aquellas experiencias que nos han causado dolor y sufrimiento, es aplicar el conocimiento consciente de lo que nos sucede y de alguna manera valorar si queremos seguir sosteniendo estas cargas que no nos permiten seguir nuestro camino o por el contrario, queremos tomar la responsabilidad desde la consciencia de disolverlas, para que tengamos la convicción firme de seguir avanzando.
En nuestra realidad el libre albedrío se convierte en una herramienta de doble filo, muchas veces, tomar las decisiones de vida desde la libertad, implica que uno se conoce perfectamente, que es capaz de superar cualquier condicionamiento exterior, que la única sabiduría válida reside en nuestro interior, que la influencia la debemos ejercer desde nuestro interior, conectando mente, espíritu, intuición y corazón, para que nuestro camino de evolución sea significativo. No disponemos de todo el tiempo del mundo. El tiempo es lo único que es finito, para nosotros los humanos, estamos aquí por un espacio de tiempo determinado. Ahora pregúntate… ¿Qué vas a hacer con el tiempo que se te ha dado?
Cuando logramos situarnos en el aquí y ahora se crea un estado de receptividad que combina el conocimiento y las sincronías, y esto nos permite realizar nuestro camino de conocimiento de nosotros mismos, permite disolver las cadenas que nos ataban las manos, para poder ser libres y afrontar nuestro camino de evolución consciente, nuestro camino de sanación del alma.
Toma la sabia decisión de divulgar aquello que tu ser siente, sin filtrarlo continuamente por la razón… dejando un espacio para que el corazón te muestre el camino del aprendizaje y el conocimiento. Tus manos son sanadoras, libéralas del yugo de la razón y toma el rumbo de la sincronización. Hazlo aquí y ahora.
Mis manos me liberan , soy libre para sanar, yo soy otro tú.
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